La inmigración como factor de desestabilización e inseguridad contra España
El uso de la inmigración como arma contra España ya no es un secreto. Detrás del flujo de pateras que llegan casi diariamente durante este mes de julio de 2020 a las costas española, ya sea a las Islas Canarias o al sur de España, se esconde la simple razón de doblegar a España para que siga la política marroquí dentro de la Unión Europea. Otras razone subyacentes son las de aceptar el hecho consumado de la anexión marroquí del Sáhara Occidental, así como ser agasajado y subvencionado por Madrid para frenar las ilegales salidas de inmigrantes.
Por ejemplo, Marruecos ya no permite que salgan tantos barcos de sus costas tras haber concluido acuerdos con Madrid y Bruselas, acuerdos condicionados a ayudas económicas. Cabe señalar que desde el acuerdo Turquía-UE sobre inmigración en 2016, tras el cierre de los puertos Italianos en 2018, la ruta marroquí de inmigración marítima a España se había convertido en la más transitada del 2019. Desde enero del 2020, 15.683 inmigrantes han llegado a España por mar, un 45% menos que en los primeros ocho meses de 2018, según el Ministerio del Interior español.
Geopolíticamente, Marruecos ha observado que la carta de inmigración es un instrumento de presión muy útil y muy fácil. De hecho, durante años, las relaciones bilaterales entre Marruecos y España tenían un patrón de comportamiento en que cuando había tensas negociaciones se incrementaban las salidas de embarcaciones con inmigrantes ilegales, pero cuando no había negociaciones casi no había salida de inmigrantes ilegales. El patrón se repite cuando Marruecos quiere más dinero; abre el camino a la inmigración ilegal, y cuando recibe el dinero, lo cierra otra vez.
Con esto en mente, España había otorgado a Marruecos 32 millones de euros en agosto 2019 para el control de la inmigración ilegal, después de conceder en julio del mismo año 26 millones de euros para "el suministro de vehículos al Ministerio del Interior de Marruecos". Y a pesar de todo eso Madrid continuó insistiendo ante las instituciones de la UE sobre la importancia crucial de Marruecos como socio estratégico en asuntos de migración y otros asuntos. "Europa tendrá que continuar haciendo un mayor esfuerzo hacia Marruecos", según declaró la vicepresidenta del gobierno español Carmen Calvo. Sin embargo, Marruecos utiliza la inmigración ilegal para chantajear a España, como bien subrayó José Manuel García-Margallo[i] actual Alto Representante de la Política Exterior y Seguridad de la Unión Europea.
Por lo tanto, Marruecos se convertirá en el ganador de este juego de inmigración aprovechando la ayuda financiera, y conseguirá empujar a la UE y España a seguir su política en El Sáhara Occidental. En caso contrario, España tendrá que pagar un alto precio por su seguridad, y esto ayudará a que las instituciones monárquicas marroquíes se mantengan fuertes y en continuidad sin cambio a la modernidad.
Estrategia marroquí para fortalecer la monarquía Alauita[ii]
En 1978, España ratificó una nueva constitución por la cual fue declarada monarquía parlamentaria, después de cuatro décadas de dictadura. En esa transición la aparición de movimientos y partidos políticos reclamando la independencia de las regiones de Cataluña y el País Vasco fue un buen augurio para la política exterior marroquí. La idea era amalgamar la cuestión del Sáhara Occidental y la cuestión catalana para sembrar la discordia en la posición española y alejarla del respeto a la legalidad internacional. Esto es, si pides la independencia del Sahara occidental ¿Por qué niegas la de Cataluña? Es uno de los juegos de la diplomacia marroquí hacia su homólogo español.
Desde el ascenso del rey Mohamed VI al trono en julio de 1999, lo más sorprendente ha sido su capacidad para preservar y extender el monopolio de la monarquía sobre el ejercicio del poder político y económico. Las estructuras autoritarias de gobierno político que heredó de su padre siguen siendo sólidas. Muchos pensaban, o esperaban, que la liberalización política controlada llevaría a la ruptura de las medidas constitucionales e informales que obstaculizan el activismo político libre, y evitan la construcción de una democracia estable[iii]
El modelo del sistema político marroquí todavía se rige por características extra constitucionales que prevalecen sobre las reglas y normas legales. De hecho, la monarquía está menos limitada por las reglas constitucionales que por las características informales de las normas sociales, los protocolos reales y el derecho consuetudinario. Marruecos desde la era de Hassan II[iv] quería a toda costa desempeñar el papel de mediador entre los continentes africano y europeo, quería abrir el país a Europa para desempeñar el papel de bisagra. Esto se refleja a través del acuerdo de asociación entre Marruecos y la UE firmado en 2002, donde España y Francia jugaron un papel decisivo en la finalización de este acuerdo. Sin embargo la élite marroquí de Makhzen encuentra el milagro español como un peligro políticamente potencial porque obliga a las instituciones marroquíes despóticas a comprometerse a acometer reformas estructurales para que el régimen continúe y reduzca la amenaza popular.
Por lo tanto, según el PNUD[v], Marruecos se ubicó a fines de 2019 en el puesto 121 en términos de desarrollo humano, y con más del 10% de los marroquíes que se encuentran en una situación de extrema pobreza total. Lo que irrita a la élite marroquí es que, alabando los méritos del reino, a menudo insiste en las sombrías situaciones España para crear conflictos imaginativos, como el asunto de la inmigración. Ahora España entra en recesión con una caída histórica del PIB del 18,5%[vi]. En esta óptica, España lidera un desplome sin precedentes que sufren todas las grandes economías de la moneda única[vii]. La inteligencia de Marruecos tiene capacidad para beneficiarse en el momento adecuado de los momentos difíciles de sus adversarios y sus vecinos para desencadenar ofensivas, que los dobleguen a sus intereses, como está sucediendo actualmente en España debido a la crisis económica causada por la pandemia de coronavirus.
Las empresas marroquíes han aumentado la cooperación con África subsahariana en banca, telecomunicaciones, seguros, y manufactura. De hecho, según el Banco Africano de Desarrollo, el 85 por ciento de la IED del reino se destinó a los estados subsaharianos en 2018[viii]. Marruecos utiliza su presencia en el continente africano, como la puerta de entrada de los países accidentes en África occidental, lo que le permite mejorar su posición internacional, apuntalar el apoyo regional y mejorar su economía. Por eso Marruecos se reincorporó a la UA en 2017, tras más de tres décadas después de abandonarla. Desde entonces, el régimen ha demostrado su interés en unirse a la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental. El rey de Marruecos ha trabajado personalmente para construir lazos con los países subsaharianos. Ha realizado numerosas visitas a varios estados y ha firmado cerca de 1,000 acuerdos económicos, políticos y de seguridad.
Este nuevo enfoque marroquí es parte de la estrategia franco-marroquí para frenar la presencia española en África occidental y mantener la presencia de empresas francesas a través de empresas marroquíes. Ya no se esconde la estrategia en este sentido porque el eje París-Rabat es muy influyente en África, y España ya había perdido el único territorio árabe en el Magreb que hablaba el idioma español. El objetivo marroquí es ser el principal vínculo entre África y Europa, y no España. Por eso Marruecos está negociando un acuerdo con Gran Bretaña en esta dirección, pensando en usar Gibraltar como vinculo entre continentes. España va a ser rodeada por Francia y Gran Bretaña, creándose una una política de nuevos ejes.
En términos de seguridad regional, la inestabilidad ha crecido en el norte de África y el Sahel durante la última década, lo que permite a Marruecos ascender como un jugador clave contra el terrorismo y desempeñar el de zona estable. O jugar el papel de aliado seguro para los actores occidentales. Mientras tanto, la voluntad del reino de contener la actividad terrorista en Libia y Malí ha fortalecido su posición como actor que puede ayudar con los esfuerzos contra el terrorismo en la región. La presencia de España ha perdido sentido en África, donde los servicios del CNI español pasan desapercibidos y débiles, a pesar de su presencia en territorio africano a través de agentes dispersos sin una estrategia real de seguridad, ni por la economía española y empresas españolas. Los ataques terrorista en Madrid el jueves 11 de marzo de 2004 fueron el acto terrorista más mortífero en Europa desde 1988, una situación que demostró la debilidad de los servicios del CNI en comparación con los marroquíes.
La urgencia española de un cambio estratégico total
Las tensiones entre Marruecos y España, reveladas por el conflicto de la delimitación marítima[ix] de las fronteras entre los dos países, incluido el territorio del Sáhara Occidental, revelan en más de un sentido la naturaleza de los enfrentamientos subyacentes entre los dos países. España intenta camuflar esta realidadque es tan clara como el sol.
En esta perspectiva, la cooperación bilateral está alineada con la estrategia marroquí para adquirir el mismo desarrollo económico que España, esto implica ventajas en todas las áreas de cooperación. La implementación de proyectos grandiosos como el del Gasoducto Argelia- Marruecos- España refleja un claro intento marroquí para influir en la economía española como preludio a una influencia política. El embargo económico contra Ceuta y Melilla, entra en esta nueva estrategia marroquíes, como el efecto e impacto histórico de la guerra de Rif de 1909[x] en la vida política de España. La línea de acion desde España habría de ser contener los intentos de rodear a Marruecos en sectores vitales (industria de defensa, seguridad de los sistemas de información, telecomunicaciones terrestres y espaciales, circuitos financieros, recursos energéticos, modo de operación de las instituciones...), sabiendo muy bien que Marruecos juegue la carta de Francia en términos de subcontratación. La segunda línea se refiere al fortalecimiento del poder español dentro y fuera de sus fronteras. En ambos casos, todo tiene que ser construido casi desde cero.
Desde el final de la guerra fría, un cambio fundamental en el ámbito internacional ha desarrollado un doble fenómeno: la extinción del Estado-nación a través de la globalización del comercio, y el debilitamiento de la noción del enemigo. Este ultimo es el punto que me parece más decisivo, ya que eclipsa la búsqueda de poder que ha marcado la historia de las relaciones internacionales desde el principio de los tiempos. La reflexión sobre el equilibrio de poder entre Marruecos y España se ha desvelado como una dura realidad ahora. Esta realidad refleja la paradoja de Marruecos como un vecino cooperante y enemigo al mismo tiempo. Esta contradicción la deben de tener en cuenta las estrategias españolas. Deben de incluirlo en sus cálculos y circunscribirlo en otro registro lejos de los cálculos de la UE, donde la política francesa y alemana sigue siendo la más dominante.
En la era de la sociedad de la información, las redes humanas se están duplicando con otras formas de caja de resonancia. Los foros de discusión, las listas de correo, las páginas personales y los sitios web pertenecen a esta nueva geografía de circulación de mensajes que está interrumpiendo el viejo árbol de información. Así la desinformación ha sido la otra contribución fundamental en la estrategia marroquí. Debido a que la práctica marroquí usa la desinformación como un arte de la guerra de la información para debilitar a España y, a veces, incluso demonizarla, es el juego práctico contra el Frente Polisario y que se hizo eco en varios instituciones occidentales.
Una de las principales debilidades de los tomadores de decisiones políticos en España es la capacidad de los marroquíes de conseguir amigos para aliarse a la tesis marroquí en el Sáhara Occidental, o adquirir mercados de inversión españoles o europeos. Por ejemplo, el rey Mohammed VI ofreció a su amigo Juan Carlos, conocido por su apoyo a la ocupación marroquí del Sahara, 45,000 metros cuadrados cerca de la ciudad turística de Marrakech[xi]. También debemos incluir líderes políticos españoles como Felipe Gonzales expresidente de España, ferviente defensor de Marruecos dentro de las instituciones españolas, europeas y en América Latina y su influencia sigue hasta hoy en el partido socialista obrero español.
Por lo tanto, España necesita relanzar el debate sobre la estrategia de poder para revelar la situación real de los antagonismos nacionales, europeos, e internacionales. Rechazar ser un estado vasallo es un desarrollo lógico en la historia de las luchas de poder. Lleva a los más astutos a desarrollar espacios de movimiento recurriendo sistemáticamente a estrategias indirectas de contra-influencia. El Mediterráneo occidental se ha convertido así en un espacio altamente militarizado, y la falta de estructuras de cooperación sigue siendo perjudicial para el tratamiento de las tensiones que convergen allí. Pero en esta ecuación, Marruecos representa la amenaza real, pero está oculta y camuflada por tratados de cooperación sin ningún impacto en la estrategia de paz duradera.
Redefinir la Base de Defensa Industrial y Tecnológica de España, mantener la vitalidad de esta industria militar es una cuestión soberana. Igualmentr España ha de garantizar el suministro y el mantenimiento en condiciones operativas de los equipos de las fuerzas armadas, en particular los que contribuyen a la implementación de la disuasión y la defensa de los intereses españoles, ya que esto constituye un pilar de su autonomía estratégica y contribuye a la influencia de España en el mundo. Por otro lado, uno debe ser consciente de que renunciar a la aptitud operativa, incluso temporalmente, corre el riesgo de perder permanentemente ciertas habilidades. En términos generales, España necesita una nueva reorganización estratégica para una gestión real de los riesgos que pesan sobre el futuro de España económica, militar y política. Desde el principio, es necesario comprender y saber que el objetivo marroquí de esta nueva estrategia ofensiva es adquirir más ventajas económicas e impulsar a España a compartir con ella los recursos naturales ocultos por el mar en el Mediterráneo y en el Atlántico, principalmente el territorio del Sahara Occidental. Al mismo tiempo Marruecos quiere forzar negociaciones sobre el futuro de Ceuta y Melilla, estratégicamente los marroquíes piensan que es hora de jugar en este cambio territorial.
España está obligada a tomar decisiones estratégicas, es decir, definir objetivos político-militares de acuerdo con el conocimiento adquirido sobre el problema dado para guiar a la sociedad española hacia una adaptación pacífica a las transformaciones nacionales e internacionales, sin ningún riesgo de conflicto. En ambos casos, la inestabilidad crecerá. Desde esta perspectiva, Marruecos está jugando la carta de subcontratista de la potencia francesa en África y en el Mediterráneo occidental, una situación que los estratos españoles no toman en serio y que hace que España sea un objeto fácil de debilitar. En el futuro, es probable que más países sirvan como teatros de una gran competencia regional. El conflicto surgirá en aquellos países donde no existía antes, y se profundizará en aquellos donde ya existe. En ambos casos, la inestabilidad crecerá. El uso de poderes mitigará el potencial de un conflicto de poder regional directo como España con Marruecos, pero las tensiones aumentarán a medida que el mundo se haga más pequeño y crezcan las oportunidades de conflicto.
[i]Elfarodeceuta,25/06/2020.
[iii]Pierre Vermeren, Le Maroc en transition, La Découverte, Paris, 2001.
[iv] Ver en este sentido el interesante trabajo de Maâti Monjib , La monarchie marocaine et la lutte pour le pouvoir: Hassan II face à l'opposition nationale, de l'indépendance à l'état d'exception, Paris, L'Harmattan, 2000.
[v] El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) dio a conocer su Índice de Desarrollo Humano 2019. Según el informe, Marruecos ocupa el puesto 121 entre 189 países y territorios. Un rango que el Reino debe a un índice de desarrollo humano (IDH) de 0.676. Una calificación que clasifica al Reino en la categoría de "desarrollo humano promedio". "Entre 1990 y 2018, el IDH de Marruecos aumentó de 0.458 a 0.676, un aumento del 47.7%", explica el informe, in Human Development Report 2019 Beyond income, beyond averages, beyond today: Inequalities in Human Development in the 21st Century
[vi] Agustí Sala , El Periódico - Viernes, 31/07/2020
[vii] Lluís Pellicer, la zona euro sufre un derrumbe del 12,1% en el segundo trimestre por la pandemia, El País, 31 julio 2020.
[viii] "Banca en la CEDEAO: por qué Marruecos es acogedor hasta África subsahariana ", The Economist, 19 de julio de 2018, https://www.economist.com/middle-east-and-africa/2018/07/19/why-morocco-is-cosying-up- a-sub-saharan-africa.
[ix] Ali El Aalaoui, Los objetivos marroquíes de su nueva delimitación marítima, revista Tradición Viva, 29/04/2020.
[x]Max Schiavon, la guerre du Rif. Un conflit colonial oublié. Maroc (1925-1926), éditions Pierre de Taillac, 2016.
[xi]Philippe Tourel, Il y a quelque chose de pourri au royaume chérifien et espagnol, Revue AFRIQUE ASIE, 28 juillet, 2020.
Copyright secured by Digiprove © 2020 Quixote Globe
Gracias por compartir este gran análisis tan clara y lucido de la debilidad de España desde la retirada del sahara occidental en févrero de 1976 hasta hoy y explica el juego marroquí sin encontrar ningún tipo de defensa.
Muy bien explicado. Gracias Alí.